Lletres: Silvio Rodríguez. Descartes. El Trovador De Barro Negro.
:
En el pabellon de mis juguetes,
un pequeno trovador de barro negro su laud ataca.
A veces no se donde se mete:
se hace amigo de las noches, de los perros, de las caminatas.
Pero por saberse preferido vuelve a mi,
con manana y sol o con alba gris.
Viene de las sombras de un secreto que no se;
viene de un quizas, viene de un tal vez...
Y para mi tane el laud
con melodia que parece azul;
y para mi cuenta su viaje
y la cancion se estrena un traje...
Y para mi tane el laud
precipitandolo como un alud;
sospecho que su melodia llega de amar la poesia.
Suena su version desesperada,
su version de los misterios que lo animan,
su version del alma.
Su cancion de amor bate las alas;
su pais -su emocion- llega y camina:
su desilusion desarma.
Y una vez que acaba la cancion queda esperar
que vuelva a partir, que vuelva a llegar.
Asi me sorprende a ratos el amanecer;
sonando que aun siempre va a volver...
En el pabellon de mis juguetes,
un pequeno trovador de barro negro su laud ataca.
A veces no se donde se mete:
se hace amigo de las noches, de los perros, de las caminatas.
Pero por saberse preferido vuelve a mi,
con manana y sol o con alba gris.
Viene de las sombras de un secreto que no se;
viene de un quizas, viene de un tal vez...
Y para mi tane el laud
con melodia que parece azul;
y para mi cuenta su viaje
y la cancion se estrena un traje...
Y para mi tane el laud
precipitandolo como un alud;
sospecho que su melodia llega de amar la poesia.
Suena su version desesperada,
su version de los misterios que lo animan,
su version del alma.
Su cancion de amor bate las alas;
su pais -su emocion- llega y camina:
su desilusion desarma.
Y una vez que acaba la cancion queda esperar
que vuelva a partir, que vuelva a llegar.
Asi me sorprende a ratos el amanecer;
sonando que aun siempre va a volver...
Silvio Rodríguez
Descartes
Silvio Rodríguez