Lletres: Nacho Vegas. Desaparezca Aquí. Ocho Y Medio.
Miro al techo que hoy ha vuelto a gotear,
hacia tiempo que no llovia asi.
Y cada gota golpeando contra los cacharros de metal
me hace pensar unas veces en sangre y otras veces en ti.
Lo que en realidad viene a ser lo mismo.
Lo que, por crueldad, ahora viene a dar igual.
O puede ser un angel que una vez perdio la fe y fue
expulsado, y que ha venido a agonizar justo encima de mi
hogar y estas gotas sean sus lagrimas.
O puede que sea por hacer entrar ya en razon
y llegar a comprender que dentro de este horror no hay
literatura, no, y eso tu lo sabes bien a fuerza de caer una
y otra vez en una trampa mortal que en el tiempo dura ya
ocho anos y medio. Sere muy breve: te quiero, y esto duele.
Y vino un pajaro a posarse en mi ventana.
Tenia una ala rota y su plumaje era gris y azul.
Y al acercar mi mano y comprobar que no, no echaba a volar
supe de inmediato que lo enviabas tu.
Lo tome entre mis garras y lo deje morir,
y cuando lo hizo aun llovia aqui.
Y la sangre al gotear entre zarpas de animal presagio mi
suerte, como una ave que volo de Madrid hacia Gijon aun herida de muerte,
rescribiendo la espiral de prometer hacerlo bien,
de cometer un nuevo error, de no saber pedir perdon o pedirlo
demasiadas veces.
Y aunque ahora escupo una oracion helado de terror ningun dios
responde aun.
?Soy yo el que no ve o es que todavia no se hizo la luz?
Sere muy breve: te extrano, y esto duele.
Trato de encontrar una salida
pero no recuerdo ni por donde hemos entrado aqui.
Y contemplo junto a mi el cadaver del que fui,
segun tu, en una ocasion,
y es la mancha de humedad la de la herida mortal
impregnada en el colchon,
y ahora que te oigo llorar en lugar de ir hacia ti
me vuelvo a anestesiar y me limito a subir el volumen
del televisor,
o me concentro en recordar, para no pensar en ti,
que tendria que llamar y que alguien venga a reparar
la gotera de una puta vez, que ya canse de recoger litros de
agua gris, gris como un metal
que un dia relucio y que ahora es suciedad.
?Que se hace para amar lo que quise despreciar ya una
y mil veces?
Sere bien breve: te he perdido, y esto duele.
Vegas, Nacho
Desaparezca Aquí